Dado que los gatos son expertos en ocultar el dolor, es fundamental que los dueños estén atentos a los cambios sutiles en su comportamiento. Reconocer los síntomas a tiempo puede marcar la diferencia en el bienestar de tu felino.
La epilepsia en perros es una enfermedad neurológica que se presenta en el 2,5% de los canes. Aunque es una patología crónica, suele sufrir una remisión espontánea o gracias al tratamiento en el 15% de los casos.
Sin embargo, los ataques epilépticos o las convulsiones conllevan diversos peligros asociados que pueden poner en riesgo la vida del animal. Por eso es una enfermedad que necesita un seguimiento exhaustivo.
Además, hay razas de perros que son más propensas a padecerla como los pastores alemanes, los retrievers o los beagles. Y aunque la epilepsia resta calidad de vida al animal, no quiere decir que el perro no esté sano y que no pueda tener una vida larga y feliz, siempre y cuando se respete su tratamiento.
Con esta guía podrás reconocer fácilmente los síntomas de la epilepsia en perros y conocer algunos de los tratamientos más habituales para la enfermedad. La epilepsia en canes es una enfermedad que está muy estudiada y es fácilmente controlable. Si piensas que tu compañero puede padecerla es esencial llevarlo al veterinario y seguir todas sus recomendaciones.
¿Qué es la epilepsia en perros?
La epilepsia en perros ocurre como consecuencia de una actividad anormal del cerebro de los canes. Es más frecuente en los machos y consiste en una serie de descargas electroquímicas en el animal que le producen convulsiones.
La enfermedad puede aparecer en cualquier momento de su vida. Aunque en el 48% de los casos ocurre entre los 6 meses y los 6 años de vida del perro.
En cuanto a sus causas, cada perro es diferente. Y hay que buscar el origen de su patología de forma individualizada. Sin embargo, se pueden distinguir varios tipos de manera generalizada:
-
Causas idiopáticas.
-
Causas hereditarias, que son las más comunes.
-
Aún así, se puede también hablar de causas extra o intracraneales.
A.- Causas extracraneales
Suelen estar causadas en un tercio de los casos por intoxicaciones por insecticidas y metaldehídos. O bien por una hipoglucemia o exceso de insulina. Y otro tercio es una consecuencia de una encefalopatía hepática.
B.- Causas intracraneales
En este caso, la epilepsia puede presentarse como una consecuencia de inflamaciones, por una causa vascular, neoplásica o un trastorno degenerativo.
En este sentido, los traumatismos en la cabeza por golpes y caídas pueden aumentar mucho el riesgo de aparición de la epilepsia en perros
¿Cómo se manifiesta la epilepsia en perros?
Esta enfermedad suele ser muy angustiosa para los dueños ya que al presenciar un ataque tienden a perder los nervios. Sin embargo, es importante saber reaccionar para que el animal también sufra lo menos posible.
Observar al perro antes, durante y después de un ataque epiléptico ayudará a reconocerlo y saber cómo actuar. Es importante mantener la calma y acompañar al animal durante todo el ataque. La epilepsia en perros se presenta en tres etapas diferenciadas:
1.- El aura
En esta etapa se puede observar un cambio en el comportamiento del perro. Estará más nervioso y desorientado y es posible que intente llamar la atención.
También pueden producirse pequeños temblores, vómitos y salivación excesiva. Si observas estos síntomas puedes ir preparando un lecho blando sobre el que colocar al perro, ya que la mayoría se desploma durante el ataque.
2.- Ictal
En esta etapa se suceden las convulsiones. El perro caerá al suelo y comenzará a sufrir violentos espasmos. Esta etapa suele durar unos segundos. O, incluso, varios minutos.
En la mayoría de las ocasiones el perro pierde la consciencia e, incluso, puede hacerse sus necesidades encima. Es importante que en esta etapa acompañes al perro en todo momento. Pero sobre todo, no intentes sacarle la lengua ya que puede mordérsela o morder tu mano involuntariamente.
3.- Post-Ictal
Es la etapa después del ataque epiléptico. El perro estará exhausto y desorientado. En ocasiones puede presentarse una ceguera o sordera neurológica que puede durar unos minutos.
Es posible que comience a correr asustado y se choque con las cosas. Con paciencia intenta calmarlo hasta que se le pase y, después, colócalo en un lugar cómodo donde pueda descansar con agua fresca para que no tenga que levantarse si tiene sed.
Tratamiento de la enfermedad
La epilepsia en perros no tiene cura. Aún así, esta enfermedad puede ser controlada y remitir con el paso del tiempo haciendo muy esporádicos los ataques. Tu perro es parte de tu familia por lo que hay que cuidarlo y seguir queriéndolo aunque padezca esta enfermedad.
Esta enfermedad no es motivo para sacrificarlo ni abandonarlo. Pero si no te ves capaz de asumir esta responsabilidad busca una nueva familia en la que pueda recibir la atención que merece.
Fundamentalmente el tratamiento es farmacológico para reducir la frecuencia y la intensidad de las descargas. Pero siempre debe ser pautado por el veterinario porque cada perro es distinto. Y aunque a veces puede tardar meses en hacer efecto, debes ser paciente. Terminará funcionando y el perro podrá seguir una vida normal y feliz.
Aunque no hay tratamientos caseros que sustituyan la toma de medicación, existen muchas pautas que puedes seguir para que el perro esté más calmado y evitar desencadenantes. Algunos pasan por evitar ciertos alimentos en su dieta, y tener al perro en un ambiente tranquilo.
Consejos y trucos
Cuando llega un cachorro a casa, una de las primeras preguntas que surge es dónde debe dormir. Es un aspecto crucial para su desarrollo, ya que un buen descanso contribuye a su crecimiento, salud y comportamiento. Además, establecer desde el principio un lugar adecuado para que duerma facilita la convivencia en el hogar y crea una rutina beneficiosa tanto para el perro como para su dueño.
Tanto en otoño como en primavera, es común que la caída del pelo del perro, conocida como muda, se intensifique. En otoño, el pelaje más ligero es reemplazado por un pelaje más denso, preparando al animal para las temperaturas más bajas.
Una de las preguntas más frecuentes que se hacen los dueños de gatos es: "¿Mis gatos están peleando o jugando?"
La diferencia entre un juego y una situación agresiva puede ser sutil, pero hay señales importantes que ayudan a entender si tu gato solo se está divirtiendo o si es el momento de intervenir para evitar una pelea.
Productos
Los perros y los gatos pueden tener problemas en sus articulaciones. Flexadin Plus es una fórmula completa que contribuye a su salud articular y a su flexibilidad.
Esta innovadora fórmula, científicamente demostrada por distintos estudios clínicos, contribuye a la salud de las articulaciones y a la flexibilidad de los gatos.
Esta innovadora fórmula, científicamente demostrada por distintos estudios clínicos, contribuye a la salud de las articulaciones y a la flexibilidad de los perros.