Cuando llega un cachorro a casa, una de las primeras preguntas que surge es dónde debe dormir. Es un aspecto crucial para su desarrollo, ya que un buen descanso contribuye a su crecimiento, salud y comportamiento. Además, establecer desde el principio un lugar adecuado para que duerma facilita la convivencia en el hogar y crea una rutina beneficiosa tanto para el perro como para su dueño.
El yoga (del sánscrito yoga, es decir, ‘unión’) se refiere a una tradicional disciplina física, mental y espiritual que se originó en la India. La palabra se asocia con prácticas de meditación en el hinduismo, el budismo y el jainismo.
Según sus practicantes, el yoga otorga como resultado:
1. En primer lugar, la unión del alma individual con la divinidad (Brahman, Shiva, Visnú, Kali, etc.), entre los que tienen una postura religiosa de tipo devocional.
2. Entre los que tienen una postura espiritualista también proporciona la percepción de que el yo es espiritual y no material.
3. En tercer lugar, el bienestar físico y mental, entre los que tienen una postura racionalista (atea o agnóstica).
beneficios del yoga para gatos
Una vez definido con exactitud el significado del concepto de yoga trasladado a nuestra sociedad occidental es interesante conocer algunos de los beneficios que puedes encontrar en su práctica con tu mascota peluda favorita, es decir, qué supone el yoga para gatos.
Según algunos estudios, hacer yoga ayuda a estirar todos los músculos del cuerpo al mismo tiempo que se consigue un estado de relajación idóneo para continuar con nuestro día a día.
Si se hace con gatos estos beneficios son aún mejores. Un estudio que revela que tener un gato disminuye hasta en un 30% el riesgo de morir por un ataque al corazón si realiza yoga.
Y, por supuesto, cuando hablamos de yoga para gatos también hay que hablar del ronroneo. Otro estudio, de Mother Nature Network, señala que el ronroneo ayuda a reducir el estrés y la tensión arterial. Los gatos puede producir vibraciones de entre 20 y 140 hercios al emitir este sonido, una frecuencia beneficiosa para una gran variedad de enfermedades.
Del yoga para gatos al yoga con gatos
La práctica del yoga con gatos empezó a practicarse en Asia a finales de los 90, y poco a poco se va extendiendo al resto del mundo.
La idea es que cuando estos animales se despiertan lo primero que hacen es estirar bien todos los músculos de su cuerpo, incluyendo los de la espalda para mantenerlos en forma. Al hacerlo, adoptan una postura muy curiosa. Postura que los humanos le hemos dado el nombre de Bidalasana o postura del gato y que podemos imitar para llevar una vida más tranquila. Es la máxima del yoga para gatos.
Se hace de la siguiente manera:
- Lo primero que has de hacer es colocarte ”a cuatro patas” en el suelo: con las manos y las rodillas haciendo de ”patas”. Las rodillas tienen que estar por debajo de las caderas, y los brazos han de estar rectos. Has de mirar hacia el suelo, teniendo la cabeza en posición central.
- Ahora, exhala aire y arquea un poco la columna vertebral hacia arriba. La cabeza ha de caer un poco, pero sin que se vea forzada.
- Después, inhala y regresa a la posición normal de ”cuatro patas”. Inhala y exhala profundamente cada vez que vas cambiando de posición. Hazlo tantas veces como sea necesario hasta que notes la espalda relajada.
¿Hacer yoga con gatos ayudará a que tanto animal como dueño mejoren la forma física. Además de la diversión de probar juntos posturas de yoga como:
● El bicho muerto o bichamudra.
● El dragón o rugidandra.
● La ensaimada o ensaimastha.
● La albóndiga o carnidundra.
● La plancha o mestiromuchundra.
● La foca o enlaplayandhra
Consejos y trucos
Tanto en otoño como en primavera, es común que la caída del pelo del perro, conocida como muda, se intensifique. En otoño, el pelaje más ligero es reemplazado por un pelaje más denso, preparando al animal para las temperaturas más bajas.
Una de las preguntas más frecuentes que se hacen los dueños de gatos es: "¿Mis gatos están peleando o jugando?"
La diferencia entre un juego y una situación agresiva puede ser sutil, pero hay señales importantes que ayudan a entender si tu gato solo se está divirtiendo o si es el momento de intervenir para evitar una pelea.
El otoño es una estación mágica que trae consigo una explosión de colores, el frescor en el aire y nuevas experiencias para disfrutar con tu perro.