Si pudieras programar la jornada ideal de una mascota, ¿cómo lo harías? ¿Qué crees que le gustaría a tu perro? Probablemente jugar, correr, saltar, comer y estar al aire libre el máximo tiempo posible sean algunas de las ideas que más se pasen por tu cabeza.
Algunas mascotas tienen la gran suerte de ser adoptados por seres humanos que no conciben vivir su propio disfrute sin la compañía de su mejor amigo. Y esto, en los perros, se nota. ¿Por qué no regalarle una jornada ideal a tu mascota y hacer que disfrute?
Quizás no lo haces porque no tienes muy claro qué es lo que más le haría disfrutar. Pues bien, hoy se resuelven todas tus dudas.
Algo tan primario y necesario como dormir es parte de los deseos más profundos de un perro. Y aunque existan diferencias a la hora de determinar cuál es el tiempo que tu perro debería dedicar al sueño, no debes olvidar que un perro necesita más horas de sueño reparador más que una persona. Aunque se despiertan con mayor frecuencia.
Verás, si vives en el campo y tu perro está acostumbrado a trabajar contigo o a tener una mayor actividad, probablemente dormirá menos que una mascota que pase una gran parte de su tiempo diario en casa.
A todos los animales les encanta jugar. Y, de hecho, dedicar algo de tiempo a divertir a tu mascota lo convertirá en un animal más fuerte tanto mentalmente
como físicamente. Todo ello gracias a la estimulación que consigue.
Puedes comprarle juguetes o hacerlos tú mismo. Pero no hay nada como jugar tú mismo con tu mascota. Tanto es así que ése es precisamente su pasatiempo favorito.
Sin embargo, si no tienes mucho tiempo para jugar con él, todavía tienes soluciones. Existen guarderías para perros o cuidadores de mascotas que pueden hacer que tu mascota descargue energía.
Por lo general, con que tu mascota coma una o dos veces al día es suficiente. Sin embargo, si lo acostumbras a comer diariamente con más continuidad, un perro te pedirá más y más. Por lo tanto, la responsabilidad de marcar un horario coherente es tuya.
Aún así, todo depende de la raza. Generalmente, los perros pequeños comen con más frecuencia que los más grandes. Y los cachorros, por su parte, también necesitan estar alimentados con una mayor frecuencia que los perros adultos.
Por otra parte, está el tema del agua. La jornada ideal de una mascota, sea la que sea, no será perfecta sin que tenga un acceso ilimitado a agua potable todo el rato.
Aunque esto no marca una rutina para todos los animales. Como en todo, dependiendo de la raza, de la actividad y del consumo de agua y alimentación que haga cada animal, sus necesidades fisiológicas variarán.
Pero no olvides que los cachorros siempre van a necesitar hacer sus necesidades con una mayor frecuencia.
Ni demasiado caliente ni demasiado frío. Lo más importante es que el entorno de tu mascota sea limpio, fresco y espacioso.
Y aunque es preferible que sea exterior para que tu perro camine a sus anchas y tenga la posibilidad de hacer sus necesidades en cualquier momento, también hay quienes disfrutan de la comodidad de un buen sofá. Sobre todo si la temperatura en el exterior es demasiado fría o demasiado calurosa en verano.
La jornada ideal de una mascota no puede estar acompañada por alguien que no seas tú, su humano favorito. Eres su mejor amigo, quien le hace sentir querido, quien lo mima y le da toda la atención del mundo.
No olvides hacérselo saber diariamente. Para una mascota saber que estás ahí pase lo que pase es sinónimo de felicidad y tranquilidad. Por eso mismo, hagas lo que hagas, nunca dejes de demostrar tu amor.
Cuando llega un cachorro a casa, una de las primeras preguntas que surge es dónde debe dormir. Es un aspecto crucial para su desarrollo, ya que un buen descanso contribuye a su crecimiento, salud y comportamiento. Además, establecer desde el principio un lugar adecuado para que duerma facilita la convivencia en el hogar y crea una rutina beneficiosa tanto para el perro como para su dueño.
Tanto en otoño como en primavera, es común que la caída del pelo del perro, conocida como muda, se intensifique. En otoño, el pelaje más ligero es reemplazado por un pelaje más denso, preparando al animal para las temperaturas más bajas.
Una de las preguntas más frecuentes que se hacen los dueños de gatos es: "¿Mis gatos están peleando o jugando?"
La diferencia entre un juego y una situación agresiva puede ser sutil, pero hay señales importantes que ayudan a entender si tu gato solo se está divirtiendo o si es el momento de intervenir para evitar una pelea.
El otoño es una estación mágica que trae consigo una explosión de colores, el frescor en el aire y nuevas experiencias para disfrutar con tu perro.
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