Cuando llega un cachorro a casa, una de las primeras preguntas que surge es dónde debe dormir. Es un aspecto crucial para su desarrollo, ya que un buen descanso contribuye a su crecimiento, salud y comportamiento. Además, establecer desde el principio un lugar adecuado para que duerma facilita la convivencia en el hogar y crea una rutina beneficiosa tanto para el perro como para su dueño.
Con el avance de las tecnologías, el rescate con perros ya no es como era antes. Este animal siempre es clave en cualquier búsqueda por su habilidad olfativa, que el hombre no tiene. Se constata que el perro cuenta con unas 250 millones de células olfativas frente las 5 millones del hombre.
Estas cifras son las que determinan que este animal es el mejor para poder encontrar a personas desaparecidas.
No obstante, y a pesar de sus magníficas cualidades, es la tecnología la que ha hecho que los rescates hayan dado un giro de 360 grados. Concretamente, se trata de los drones. Los perros y los drones son la nueva pareja de moda en los rescates. De modo que al rescate con perros hay que añadir esta nueva tecnología punta.
Los nuevos rescates: Perros apoyados con drones
Los drones, a diferencia de los perros, son mucho más seguros. Seguridad que se plasma en los equipos, en la eficacia de los operativos. Además, un dron por su rapidez y eficacia, reduce el tiempo de la búsqueda y mejora el flujo de información.
Por otra parte, a diferencia del rescate con perros, los drones llegan a lugares de muy difícil acceso para los caninos. El dron es capaz de rastrear en muy poco tiempo áreas amplias, a las que los perros no llegan.
No obstante, los perros son capaces de rastrear una zona como es un bosque de manera mucho más profunda que lo haría un dron. Por tanto, los dos son más que necesarios, si se quiere lograr un rescate efectivo.
Por último, se encuentran los costes de esas operaciones de rescate con drones. Mediante el uso de estos aparatos no tripulados, los costes pueden verse muy reducidos. En las operaciones en las que han sido los helicópteros junto con su tripulación los responsables de la operación, los costes se han visto aumentados.
El caso de Suiza en los rescates
Un claro ejemplo de estos rescates se encuentra en Suiza, por la enorme cantidad de personas que desaparecen cada año. Las cifras hablan de 3.000 a 5.000 personas.
En cuanto al tipo de personas que suelen desaparecer, se constata que son en su mayoría deportistas accidentados, senderistas, niños, personas con demencia o con ideas suicidas.
Debido al gran problema con el que tiene que lidiar este país, existen grandes asociaciones de rescate. La más conocida es la denominada REDOG (Asociación Suiza para Perros de Búsqueda y Rescate). Se trata de la única asociación miembro de la Cruz Roja que busca a personas desaparecidas en el país.
REDOG, junto con la Federación Suiza de Drones Civiles, trabajan por mejorar los rescates cada año. El año pasado fueron 22 misiones. Y desde otoño ya han participado en 12 operativos de búsqueda y rescate. Sorprende que las dos asociaciones trabajen de forma voluntaria en cada uno de las búsquedas y rescates. De forma, que lo hacen por ayudar sin ningún tipo de remuneración económica. Los costes de estas operaciones también son voluntarios, ya que se sufragan con donaciones.
Rescate con perros y drones
El rescate con drones incluye un equipo de especialistas para pilotar este aparato. Se necesita una licencia de la Federación y años de experiencia para poder pilotar uno.
Por su parte, el rescate con perros sigue siendo exactamente el mismo. Se realizan pruebas con guías en las que se pone a los perros en situaciones de búsqueda de un ciclista o un senderista perdidos en el bosque.
Estos entrenamientos de rescate con perros, pueden tener una duración de 3 a 5 años. Y siempre acompañan a su guía, ya que obedecen y siguen cada una de las instrucciones. Un ejemplo es cuando el perro encuentra al desaparecido y tiene que entregar a la guía en su boca una especie de cuerda o bien ladrar.
Tradición y tecnología se juntan en estas operaciones de rescate. Y es precisamente la tecnología, el olfato del perro y la experiencia del hombre combinadas las que hacen de estas misiones de rescate las más eficientes.
Consejos y trucos
Tanto en otoño como en primavera, es común que la caída del pelo del perro, conocida como muda, se intensifique. En otoño, el pelaje más ligero es reemplazado por un pelaje más denso, preparando al animal para las temperaturas más bajas.
Una de las preguntas más frecuentes que se hacen los dueños de gatos es: "¿Mis gatos están peleando o jugando?"
La diferencia entre un juego y una situación agresiva puede ser sutil, pero hay señales importantes que ayudan a entender si tu gato solo se está divirtiendo o si es el momento de intervenir para evitar una pelea.
El otoño es una estación mágica que trae consigo una explosión de colores, el frescor en el aire y nuevas experiencias para disfrutar con tu perro.