Seguro que en algún momento de tu vida has intentado comunicarte con tu gato emitiendo sonidos similares a su "miau" y casi nunca obtienes respuesta.
Según la primera acepción de la Real Academia Española de la Lengua, dolor es: una sensación molesta y aflictiva de una parte del cuerpo producida por causa interior o exterior.
Pero el caso es que hay muchos tipos de dolor. Según su duración podemos hablar de dolor agudo o crónico. El agudo puede alargarse desde unos pocos segundos hasta varios meses, a partir de los cuales estaremos hablando de dolor crónico, donde hay un componente emocional y único para cada individuo.
Aunque tengan todo ese pelo suave y mullido que tanto te gusta acariciar, los gatos también necesitan protegerse de las inclemencias del invierno. Hoy te traemos algunos consejos para cuidar de tu amigo en esta época del año.
Comprueba sus patas con regularidad
Cuando se tienen varios amigos felinos, a menudo pueden suceder peleas de gatos en un mismo hogar. Algunos gatos simplemente no le darán una oportunidad a la paz.
Y es que existen varias razones por las que los gatos pueden no llevarse bien. La más común es la falta de socialización, la falta de experiencias agradables con otros gatos al principio de la vida.