Cuando llega un cachorro a casa, una de las primeras preguntas que surge es dónde debe dormir. Es un aspecto crucial para su desarrollo, ya que un buen descanso contribuye a su crecimiento, salud y comportamiento. Además, establecer desde el principio un lugar adecuado para que duerma facilita la convivencia en el hogar y crea una rutina beneficiosa tanto para el perro como para su dueño.
Al igual que las personas, los perros también sufren estrés. Dormir mal o una mala alimentación pueden ser los causantes de este estado. Pero, ¿sabes cómo calmar los nervios de una mascota en caso de que estés con ella y creas que lo necesite?
En caso de que tu perro sea aún un cachorro y sea más nervioso de lo normal no es un síntoma del que tengas que preocuparte. Por lo general, al pasar el año de edad se irá tranquilizando poco a poco. Pero si ya es adulto y sigue con un elevado nivel de estrés tendrás que aprender cómo calmar los nervios de una mascota.
Sobre todo porque, aunque no lo creas, estos problemas y comportamientos disminuyen su calidad de vida. Y algo que sí habrás notado es que influirá, negativamente, en tu convivencia con tu mascota.
¿Solución? Necesitas ponerte en marcha en cuanto detectes el problema.
¿Sabes cómo calmar los nervios de una mascota?
1.- Los masajes relajan a cualquiera
Sobre todo a los animales. Y existen ciertas pautas para poder dar un masaje en condiciones a tu animal. De hecho, si lo conviertes en rutina, podrás observar cómo tu perro se va calmando poco a poco durante la práctica y se acostumbra a relajarse de manera natural.
Además, un buen masaje forma parte de una rutina más que necesaria. Con él podrás comprobar que tu mascota está bien, que no tiene ningún bulto que no debería o que no sufre dolores en ninguna parte del cuerpo.
Aunque lo mejor de todo es que este momento será vuestro ratito juntos en un ambiente más que relajado.
2.- Si tú no te calmas, difícilmente lo hará tu mascota
Los perros recogen tu propia energía. Si estás nervioso por una situación intenta no transmitirle ese comportamiento a tu perro. Solo empeorará su ansiedad.
Entonces, ¿cómo calmar los nervios de una mascota si ni tú mismo estás calmado? Por suerte, existen ciertos trucos.
En primer lugar, es importante que te mantengas callado y tranquilo cuando te encuentres con él. Y si él también está nervioso, procura mostrarle tu cara más relajada. No te alteres lo más mínimo. También es recomendable que respires lentamente y te muevas despacio, sin gestos bruscos.
3.- Pon distancia de por medio
Si tu mascota se pone demasiado nerviosa cerca de ciertas cosas, personas u otros animales, lo mejor es que pongas distancia de por medio.
De hecho, es una de las mejores tácticas para relajar al animal. ¿Por qué enfrentarlo a algo que le provoca ansiedad si no es aboslutamente necesario?
4.- Manzanilla para perros
Una de las hierbas que sirve tanto para humanos como para animales es la manzanilla. Si aún no sabes cómo calmar los nervios de tu mascota y lo has probado todo, deberías probar también esta técnica.
Es muy posible que el estrés que sufre tu perro se deba a algún problema digestivo. Y la manzanilla es el remedio perfecto. Como consejo, si ves que no le gusta, prueba con un poco de miel.
Otra opción es aprovechar suplementos como Zylkene que ayuda a calmar los nervios y el estrés en perros y gatos.
5.- La música amansa a las fieras
Y no es un mito. Muchos dueños y organizaciones que trabajan con refugios de animales reproducen música clásica con un volumen bajo para tranquilizar a los animales.
Lo mejor es que te sientes con tu mascota en su lugar preferido de la casa, lo acaricies y crees un ambiente tranquilo. Reproduce algo de música y acarícialo mientras acompañas tu respiración con el ritmo de una canción tranquila. Lo relajarás poco a poco.
6.- Evita los juegos activos en casa
Tu mascota necesita entender que el hogar es un espacio tranquilo y relajado. No un sitio donde deba alterarse y jugar y correr sin parar.
Para hacérselo entender, puedes optar por comprar juguetes de inteligencia y dejar las actividades que impliquen saltos y carreras para cuando estés en la calle.
7.- Déjalo que se sienta libre
A veces, la ansiedad en los animales no es más que energía que se necesita gastar. En este sentido, no hay nada mejor que dejar al perro por su cuenta para que se sienta libre y feliz.
Es recomendable que lo lleves a un parque o a un espacio abierto donde puedas tenerlo controlado. Cuando estés ahí, suéltale la correa y déjalo jugar y desahogarse.
No olvides que cuando sometes a un perro a un largo periodo de actividad física vuelve más cansado a casa. De esta manera, se relajará y dormirá mucho mejor.
Consejos y trucos
Tanto en otoño como en primavera, es común que la caída del pelo del perro, conocida como muda, se intensifique. En otoño, el pelaje más ligero es reemplazado por un pelaje más denso, preparando al animal para las temperaturas más bajas.
Una de las preguntas más frecuentes que se hacen los dueños de gatos es: "¿Mis gatos están peleando o jugando?"
La diferencia entre un juego y una situación agresiva puede ser sutil, pero hay señales importantes que ayudan a entender si tu gato solo se está divirtiendo o si es el momento de intervenir para evitar una pelea.
El otoño es una estación mágica que trae consigo una explosión de colores, el frescor en el aire y nuevas experiencias para disfrutar con tu perro.