Cuando llega un cachorro a casa, una de las primeras preguntas que surge es dónde debe dormir. Es un aspecto crucial para su desarrollo, ya que un buen descanso contribuye a su crecimiento, salud y comportamiento. Además, establecer desde el principio un lugar adecuado para que duerma facilita la convivencia en el hogar y crea una rutina beneficiosa tanto para el perro como para su dueño.
Cuando se trata de la alimentación de gatos no existe un plan que se ajuste a todos los felinos. Los gatos tienen diferentes necesidades nutricionales y calóricas dependiendo de su edad y de cualquier condición crónica que puedan tener.
Un enfoque de dieta única no se ajusta a todos los gatos. La alimentación de los gatos debe ser personalizada para cada etapa de la vida.
Alimentación de gatos
Aprende qué comida es la mejor para tu mascota en cada etapa de su vida:
Gatitos (hasta 12 meses)
Los gatos bebés necesitan más calorías que los que ya son adultos. Lo mejor es una dieta completa y equilibrada que se base en los alimentos que ellos deben tomar de normal.
Cuando busques una marca para la alimentación de gatos examina que se especifique para la edad que es. Lo mejor será que ponga para "gatitos". Asegúrate de seguir las recomendaciones del tamaño de la porción que aparecen en la etiqueta de un alimento para gatos.
Algunos se basan en el peso, mientras que otros se basan en la etapa de la vida concreta. Si la dieta de tu gatito no cumple con los requisitos nutricionales durante este tiempo, su crecimiento puede no ser el deseado.
Adultos (1 a 6 años)
Los gatos adultos deben seguir una dieta completa y equilibrada para mantener un peso saludable y ayudar a evitar cualquier enfermedad. Busca las marcas de alimentos para gatos que están formuladas explícitamente para los gatos en mantenimiento o para los gatos en todas las etapas de su vida.
Las opciones sanas de alimentación de gatos son las comidas sin granos húmedos, entre otras opciones. Debes evitar darle a tu felino los restos de tu comida o las golosinas para ayudar a evitar el aumento de peso.
Muchos restos de comida son altos en calorías y no proporcionan los nutrientes esenciales que un gato necesita. También debes evitar, sin duda, darle a un gato adulto comida que sea para gatitos. No le hará ningún bien. Es una fuente de calorías altamente concentrada que puede llevarle a tener sobrepeso.
Gatas que estén embarazadas
La nutrición de tu mascota es especialmente importante cuando está embarazada. Igual que los seres humanos la alimentación de gatos en este estado puede afectar directamente al bebé. Por eso hay que tener mucho cuidado.
Las gatas embarazadas no solo necesitan calorías adicionales, sino que también necesitan nutrientes adicionales. Si no alimentas correctamente a tu gata en esta etapa, es posible que no pueda producir suficiente leche para sus gatitos. Durante el embarazo, una dieta rica en calcio es especialmente importante.
Si no tiene suficiente leche almacenada, tendrá un mayor riesgo de desarrollar eclampsia mientras está amamantando. Esta grave enfermedad está marcada por una caída en los niveles de calcio en la sangre. Los síntomas son: temblores, debilidad, fiebre y desorientación. Si observas que esto le ocurre a su gato llévalo inmediatamente al veterinario.
Gatos mayores (7-10 años o más)
Los gatos, a medida que envejecen, desarrollan lentamente problemas de salud crónicos y pierden músculo. Aunque su esfuerzo físico sea menor en esta etapa de la vida, siguen necesitando la misma cantidad de calorías que hace unos años.
Busca alimentos específicamente formulados para gatos mayores. Pero, además, hay que tener en cuenta que si tu gato tiene alguna enfermedad concreta deberás llevarlo al veterinario para que te ayude con la alimentación de tu felino ya que habrá alimentos específicos que deberá tomar.
Consejos y trucos
Tanto en otoño como en primavera, es común que la caída del pelo del perro, conocida como muda, se intensifique. En otoño, el pelaje más ligero es reemplazado por un pelaje más denso, preparando al animal para las temperaturas más bajas.
Una de las preguntas más frecuentes que se hacen los dueños de gatos es: "¿Mis gatos están peleando o jugando?"
La diferencia entre un juego y una situación agresiva puede ser sutil, pero hay señales importantes que ayudan a entender si tu gato solo se está divirtiendo o si es el momento de intervenir para evitar una pelea.
El otoño es una estación mágica que trae consigo una explosión de colores, el frescor en el aire y nuevas experiencias para disfrutar con tu perro.